Dwarf Fortress para Windows

Dwarf Fortress es un regreso a los juegos de fantasía para un solo jugador de los años 80, con gráficos (o la falta de ellos) que lo acompañan. Dwarf Fortress genera un nuevo mundo cada vez que juegas. El mundo es bastante elaborado, con mapas de elevación, superposiciones de lluvia y drenaje, crecimiento de vegetación y varios otros factores ambientales disponibles para permitirte averiguar cómo controlar la tierra. Añade la mecánica básica del juego de un grupo de enanos que necesitan construir una fortaleza y buscar oro en las montañas y tienes una simulación bastante profunda cruzada con un juego de estrategia.

Los gráficos de Dwarf Fortress son todos ASCII. Los códigos de color y los caracteres utilizados representan el tipo de terreno. Tú estás representado por un solo carácter ASCII en el mapa más grande. Si jugaste a un juego llamado Rogue en los años 80 o principios de los 90, esto te resultará familiar. Para aquellos que están acostumbrados a gráficos de alta resolución, este juego va a ser simplemente raro.

Hay mucha profundidad oculta en Dwarf Fortress, pero va a llevar un buen tiempo aprender el juego y averiguar la estrategia. Si puedes sobrellevar la falta de gráficos, aquí hay una jugabilidad gratificante. Hemos tenido partidas que duran un mes de juego regular, pero tienes que estar dispuesto a sumergirte en la fantasía y comprometerte con el juego para aprovecharlo al máximo. Para los jugadores de la vieja escuela, Dwarf Fortress es un éxito. Para otros, puede ser demasiado inusual.